Mi nombre es Christine Schleinitz y mi vida es un carrusel de emociones desde hace 6 años y medio! Aprendí a soltar, aprendí que está bien enlodarse, está muy bien gritar y cantar con pasión…. Esto lo aprendí desde el día 1 en que mis hijos Diego y María Renne se unieron al movimiento Scout en el Grupo #26 de Protejo Mi Comunidad en Boca del Monte.

Yo era una mamá muy sobreprotectora y en este grupo aprendí que hay que dejar ir esos sentimientos. Inicié en el movimiento como mamá Shadow (sombra) cada vez que podía apoyaba en las diferentes actividades, en cada activación me fui incorporando un poco más.

Aún recuerdo el sentimiento de miedo cuando Diego paso a la sección de Unidad o cuando María Renee tuvo su primer acantonamiento, a partir de esos momentos me di cuenta que mis hijos encontraron su lugar perfecto, el lugar donde pueden ser ellos libres, aprender a ser independientes, a trabajar en equipo y lo más importante a pertenecer a un movimiento donde lo importante es ser niño y desarrollar habilidades que les servirán en un futuro.

En el año 2019 nos hicieron la invitación para unirnos como dirigentes, a mi esposo Javier y a mí, la verdad estaba muy insegura de dar este paso, ya que para mí era mucha responsabilidad, pero nos aventamos … lamentablemente la pandemia nos impidió desarrollarnos en esta sección. Pero ahora en el 2022 nos dieron la oportunidad para ser dirigentes de una de las Ramas Mayores, la sección de Rovers, puedo decir que me siento plena y muy contenta de ser consejera de esta sección.

Este movimiento nos ha ayudado a compartir muchas aventuras en familia, a ser más unidos, mis hijos no son los mismos desde que se unieron al grupo, y puedo decir que yo no soy la misma, ser Scout ha cambiado por completo nuestras vidas, y he conocido personas que llevo en mi corazón y que se han convertido en parte de mi familia y por todo esto estoy infinitamente agradecida con el Grupo Scout # 26 y Protejo mi Comunidad!!

Cristine Schleinitz/ Dirigente Scout