Desde un principio se consideró la invitación de un Grupo Scout Internacional a efecto de darle un mayor realce al evento de ACANAMAS y demostrar a la juventud de Guatemala que la hermandad existe y que no tiene fronteras.

El Grupo Scout que aceptó el desafió, fue el Grupo israelí Shevet Galim, quien tuvo la osadía de viajar miles de kilómetros para solidarizarse con nuestra causa y acompañarnos y compartir de este evento que movió más de mil personas, la mayoría niños.

Ver jóvenes de una cultura diferente e identificados con objetivos similares de paz, hermandad y amor fue una experiencia muy reconfortante y que invita a seguir adelante en la educación no formal del método Scout.

Los niños, lobatos y lobeznas Scout, Dirigentes y Padres de Familia se sintieron estimulados a permanecer en el movimiento Scout al vivir la experiencia que ser scout es una causa humanitaria con impacto a nivel mundial.

“Fue muy bonito ver a los diferentes grupos scouts unidos”.  Comentó Tomer, uno de los jóvenes voluntarios” también motivó a los scouts que permanezcan juntos y que continúen trabajando por una comunidad unida.  Roni, incitó a los compañeros scouts de Guatemala a seguir organizando este tipo de eventos que hacen que las personas de todo el país se unan y convivan sanamente.  Maya, también voluntaria scout de Shevet Galim, recomendó a los jóvenes a permanecer en el movimiento scout porque promueve un sentido de unidad y de familia.

Gracias Shevet Galim por dejar esta bella experiencia en el Movimiento Scout de Guatemala. Gracias, especialmente por dejar alegría y esperanza de ser mejores en nuestro grupo Scout Protejo Mi Comunidad en Boca del Monte Guatemala.

Roberto Alfaro